SolandaGoyes, exvocal de la Judicatura, sostiene que los audios atribuidos a Henry Gaibor confirman presiones a jueces y evidencia una estructura destinada a proteger a Mario Godoy y a funcionarios de su entorno.
Las declaraciones de Solanda Goyes, exvocal del Consejo de la Judicatura, en Fm Mundo, reavivaron la crisis institucional del organismo, tras la filtración de audios que revelarían una presunta interferencia directa en la administración de justicia.
Para Goyes, ya no se trata de percepciones ni rumores, sino de hechos concretos que comprometen gravemente la independencia judicial en el país.
Según la exvocal, el audio atribuido a Henry Gaibor, entonces director provincial de Pichincha, evidencia un pedido expreso a un juez para que actúe de determinada manera en un proceso por narcotráfico y lavado de activos.
En la grabación, explicó, se solicita “poner atención” a la defensa de un ciudadano serbio procesado en el caso Euro 2024, con el objetivo de que, aun con una eventual sentencia condenatoria, no se ordene la incautación de bienes valorados en aproximadamente USD 5 millones.
Goyes afirmó que Gaibor era una persona de absoluta confianza del presidente del Consejo, Mario Godoy, y recordó que el procesado en este caso fue defendido previamente por la esposa de Godoy, en un estudio jurídico del que el propio titular de la Judicatura fue accionista.
La exfuncionaria aseguró que este no sería un hecho aislado. Señaló que dentro del Consejo se habrían realizado maniobras para evitar la destitución de jueces de la Unidad Anticorrupción que continúan actuando en casos sensibles.
Entre ellos mencionó a la jueza Cossette Lara, quien integró el tribunal que sentenció el caso Euro 2024 y emitió un voto salvado coincidente, según Goyes, con lo solicitado por la defensa del procesado.
Recordó además que, en enero de 2025, durante allanamientos a domicilios y oficinas de jueces anticorrupción, se hallaron sumas importantes de dinero, lo que derivó en suspensiones temporales.
Sin embargo, afirmó que algunas de estas decisiones fueron revertidas posteriormente con votos favorables dentro del propio Consejo, lo que, a su criterio, demuestra un patrón de protección interna.
Goyes fue especialmente crítica con la reacción institucional frente al escándalo. Calificó como “vergonzosa” la decisión del Pleno de solicitar la renuncia de Gaibor en lugar de removerlo e iniciar de inmediato un proceso disciplinario por interferencia en el sistema judicial, una falta considerada gravísima.
Advirtió que, al aceptar una renuncia y no una destitución, se deja abierta la posibilidad de que el funcionario regrese al sistema judicial.
También cuestionó la licencia solicitada por Godoy para preparar su comparecencia ante la Asamblea Nacional, señalando que el Consejo ni siquiera convocó de inmediato a la vocal suplente para asumir la presidencia.
“Dejaron al Consejo en un limbo a propósito”, afirmó.
Para la exvocal, el actual Consejo de la Judicatura ha tenido tiempo suficiente para demostrar su rumbo y no lo ha hecho.
Por otro lado, el abogado Felipe Rodríguez, quien reveló el caso del juez Carlos Serrano, advirtió que “hay más jueces presionados, no solo en la unidad anticorrupción”.
“Esta bomba es mucho más grande de lo que se ve”, sentenció el jurista.
Radio Pichincha
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